Capitulo 11

            Medio mes había pasado y aun no comprendía por que George estaba molesto, furioso mas bien dicho. No era que me insultara sino que... era cortante, no al grado de ser grosero, pero solo cortante y frio. No quedaba nada de esas bromas tímidas y las conversaciones cortas acerca de las guitarras también se habían ido.

            Paul siempre parecía estar deprimido, lo cual era extraño ya que siempre estaba de excelente humor, bromeando aquí y allá, siempre sonriendo, ahora era excesivamente callado. Los demás chicos parecían estar normales pero ellos... no entendía, el día en el que había intentado preguntarle que le pasaba solo me había contestado: "Nada, estamos bien. Por cierto, te ves hermosa." No era algo que me ayudara mucho...

            Pensando en todo esto me despedí de Pete quien ahora estaba haciendo un punto de llegar temprano a la escuela, el que John se cambiara de colegio le estaba sentando bien en algunos aspectos.

            Salí de la casa peleando con mi estúpida bufanda, se cayó al suelo y antes de que pudiera recogerla alguien la puso sobre mis ojos.

-Dime que hoy no iras al colegio-

-No iré-

-Perfecto, vámonos-

-Dijiste que lo dijera, no que lo hiciera-

Comenzó a reírse y retiro la bufanda, no sin antes besarme. Era John.-Vamos a mi casa, como el otro día-

            No malpiensen, no había pasado nada, de hecho, era bastante infantil cuando se pensaba bien: habíamos llegado a su cuarto, hacia bastante sol incluso ahí y el había hecho una casa de campar improvisada en el suelo para podernos meter debajo de ella y  finalmente yo lo había convencido de que me mostrara sus dibujos. Mimi había llegado y se había mostrado muy sorprendida por verme ahí y por el hecho de que tuviera mi ropa puesta.

-Estará Mimi?-

-No lo creo-

-No iras al colegio?-

-No-

            Comenzamos a caminar hacia su casa.

-Por cierto, que hacías afuera de mi casa?-

-Llevaba casi 10 minutos vigilándote, escuche la puerta y casi le hago lo mismo a Pete-

            Me reí al pensar en la reacción de Peter.

            Llegamos a su casa, donde John se asomo por la ventana y me confirmo que su tía seguía ahí. Paso una hora, donde nos ocultamos en los arbustos esperando a que se fuera, después, John uso su llave para entrar.

-Quieres algo de tomar?-

-Agua-

-Agua?-

-Dije agua, primero ciego y ahora sordo...-

            Se rio y se dirigió hacia la cocina, regresando con un vaso de agua. Para este momento yo ya estaba terriblemente nerviosa, que tal si ahí pasaba todo? Que tal si...? Eran muchos de esos pensamientos, apenas y podía sostener mi vaso de agua debido al leve temblor de mis manos, en cuanto se acercó a mi, dicho temblor incremento y decidí que lo mejor seria bajar el vaso.

-Te apetece subir?-

-A-arriba?-

-No, abajo- soltó una risita.-Y luego quien es el idiota...-

            Tomo mi mano y me guio hasta su habitación mientras cantaba y marchaba haciéndome reír y olvidar mis nervios. Su habitación era un desorden, nada nuevo ahí. Hojas de papel aventadas por todo el lugar, algunas metidas en cajones a la fuerza a tal grado que pareciera que el cajón las escupiría en cualquier momento. Me acerque a ver sus nuevos dibujos y note que la esquina de uno de sus muebles estaba rota.

-Que le paso?- le pregunte.

-Se rompió-

-Déjame ver tu mano-

            Tome su mano y bufo de fastidio, si, tenia cicatrices.

-Ahora que paso?-

-Una discusión con Mimi, no que te interese-    

            Alejo su mano de mi con cierta molestia y comenzó a jugar con la radio, hasta encontrar Radio Luxemburgo y llenar la habitación con Elvis Presley.

            Se dejo caer en su cama y me señalo el espacio a su lado, me senté ahí, sintiéndome como una zombi o algo así, mi mente no estaba fija en nada, bueno si en algo: quería acostarse conmigo... Puso su brazo alrededor de mi y me acerco a el, sin decir nada un instante. Tenía miedo, de preguntarle que éramos, tenía miedo de que se enfadara y me sacara de ahí y que jamás volviera a hablarme. En vez de expresarle todos mis temores, comencé a trazar figuras en su brazo y su mano mientras cantaba una canción de Lonnie Donegan.

 

NARRACION JOHN

            Extrañamente, Bess estaba callada. Casi nunca lo estaba, sonreí al recordar la chica tímida y seria que había conocido cuando ella llego. No fumaba, no bebía, escribía mucho, le gustaba leer y la mayoría del tiempo guardaba silencio. De todas las formas posibles, ella era irresistible para mí. Acerque mis labios a su nuca y dio un pequeño salto, vaya, acaso estaba nerviosa? Uno pensaría que una chica bien experimentada como ella estaría preparada para cualquier cosa...

            Sin embargo, a los cuantos segundos dio la vuelta para fijar sus labios sobre los míos, dulce y cálidamente, con mucho cuidado... no pude resistir aumentar el ritmo, acercarla mas a mi, tocar sus piernas, sus hombros, su abdomen, lo quería todo ahí y en ese momento. Baje mis labios a su cuello pero acerco su boca a la mía de nuevo, sumergiéndome en un frenesí, la deseaba mas que nunca.

            Así transcurrieron las cosas, girábamos por mi cama mientras nos besábamos apasionadamente, sus manos comenzaron a recorrer mi cabello y sentí su leve temblor. Me detuve y quede ahí, encima de ella por algunos segundos, su mirada penetrante ahora era mucho mas suave y todas las emociones que volaban atraves de esos ojos...

            Tome su abrigo y lo avente al suelo, haciendo lo mismo con la chaqueta de su uniforme, metí mi mano debajo de su blusa, estaba muy caliente... sin romper contacto visual pude ver como paso saliva. Estaba nerviosa.

 

NARRACION EVANGELINE

            Metió la mano debajo de mi blusa, sus dedos subiendo un poco por mi abdomen mientras me observaba fijamente, analizando cada movimiento, no hice nada para detenerlo así que continuo. Saco su mano y comenzó a levantar mi falda, comenzó a quitar el botón de sus pantalones y mi temblor involuntario se hizo mas intenso. Estaba nerviosa? Puta madre, si, y aparte, estaba que me moría de miedo.

 

NARRACION JOHN

            Tan solo su aroma me estaba volviendo loco, levante un poco su falda, solo unos minutos y seria mía... volví a mirarla, asegurándome de que estuviera bien, normalmente, llevaba a la chica a mi habitación y sin mas preámbulos me la tiraba, estuviera bien o no. Pero me detuve, se veía nerviosa y ¿asustada? Si, asustada, en ese momento para mí, no era Bess, sino Evangeline Bessette, aquella chiquilla callada que apenas y era una niña. Aquella niña a quien le había costado tanto trabajo comenzar a hablarme y considerarme su amigo y no solo "el amigo de Peter". Era solo una niña, y estaba aterrorizada.

¿En que diablos estaba pensando? Se veía frágil y delicada, su rostro blanco estaba enrojecido de las mejillas y se veía muy asustada. Me sentía como el lobo en esos cuentos de hadas. Fije mi mirada sobre la suya y sus ojos me lo decían todo: estaba asustada y no quería hacerlo. Sintiéndome algo decepcionado y avergonzado, acomode su falda y mi pantalón, quedando recostado a un lado de ella. Aquí estaba la chica que se suponía que tenía más experiencia en todo Liverpool y no quería, bueno, no me lo había dicho directamente pero yo lo percibía. Almenos de que ella fuera... no, todos sabían que Bess no era virgen, era algo imposible, una Bess virgen era como... como un Paul sin pestañas largas. Simplemente, no cuadraba.

-J-John?-

            Se sentó y me observo, curiosa y algo desconcertada.

-Si?-

-Pensé que...-

-Oh, estoy cansado- le sonreí débilmente

 

NARRACION EVANGELINE

            ¿Cansado? Oh no, mierda, seguramente yo había hecho algo mal... algo muy mal si John no quería hacerlo conmigo...

-¿Estas molesto conmigo?-

-No, solo estoy cansado, ven acá-

            No podía creer que estuviera haciendo esto, o algo estaba muy mal o el se había golpeado la cabeza... me estaba rechazando, estaba rechazando acostarse conmigo. Joder, si, había estado nerviosa y toda la cosa pero no era para tanto. Era como si no fuera el, jamás había escuchado que rechazara una oportunidad así...

            Voltee a verlo y sus ojos ya estaban cerrados, se estaba quedando dormido. Apretó su brazo alrededor de mi cintura y me volví a recostar a su lado, sin poder dejar de pensar en lo que posiblemente había hecho mal. A los pocos minutos escuche su respiración mas tranquila, estaba dormido.

            No supe realmente que paso, solo puedo suponer que yo también me quede dormida, desperté encontrando sus cálidos labios sobre los míos, jalo sus cobijas, tapándonos completamente mientras seguía besándome, de nuevo mis dudas regresaron pero el las disipo con sus besos intensos, me hizo soltar una risa cuando hizo una mueca graciosa. De repente, se escucho la puerta de abajo.

-John? Ya estas en casa?-

-John, que hora es?-

-Las... pásame mis gafas, las 2-

-L-las 2? Yo salía a la 1 y llego a mi casa a la 1:20, joder!-

-Espera, Mimi esta allá abajo-

-John, que estas haciendo?-

            Era Julia, me tape con la cobija y recé para que la tierra me tragara, no iba a ver escapatoria de esta, Mimi seguramente me llevaría hasta la casa de Agatha para que les explicara lo que hacia en la cama de su sobrino.

-Estaba dormido, llegue hace algunos minutos-

-Oh John, dormido tan temprano- era la voz de Mimi en un tono reprobatorio.

-Mimi, por que no me muestras las nuevas cortinas que compraste- le dijo Julia.

-Claro que si, es por acá-

-No, las del cuarto del fondo, el que pondrás en alquiler-

            Esta fue mi clara oportunidad y rápidamente me puse mis zapatos y salí corriendo de ahí, llegue a la puerta y salí a la calle. John venia detrás de mi.

-Y ahora que?-

-Olvidaste tus cosas-

-Gracias, tengo que irme-

-John, olvidaste tu libro de historia del arte-Dijo un poco demasiado alto un chico.

            Era alto, usaba gafas también, cuello de tortuga negro que combinaba con su pantalón y zapatos, su cabello estaba estilizado como el de John y todos los demás teds de Liverpool.

-Déjalo Stu, Mimi esta adentro-

-Cabron, faltaste de nuevo-

-Esta vez tuve una razón-

            Percibió que yo estaba ahí y fijo su mirada en mi, por que John solo tenia amigos apuestos?

-Quien es la chica?-

-Es Bess-

-Con que tu eres la famosa Bess... yo soy Stuart Sutcliffe, mis amigos me llaman Stu-

-Hola Stuart, un placer-

-Stuart? Te dije que...-

-No soy tu amiga-

             Miro a John un poco desconcertado mientras en este aparecía su expresión de burla usual. Volteo hacia mi y noto que estaba sonriendo, cayo en la cuenta de que era una broma.

-Oh, ya veo, entonces tendremos que cambiar eso, no?-

-Quizás, de donde conoces a John?-

-Vamos juntos al colegio, ya sabes, el instituto de arte. Déjame adivinar, vas en el Liverpool Institute no?-

-Si, como lo supiste?-

-Aun estas usando el uniforme-

            Solté una risa, este nuevo chico ya me caía bien. Vi el reloj de la muñeca de John, definitivamente era hora de irme.

 

NARRACION EVANGELINE

            Dando como excusa que iría a escribirle a mis padres, me escabullí de aquel lugar, los chicos estaban ensayando, Pete me había llamado hacia allá pero es que ya era muy tarde... tome mi mochila y pase rápidamente, en caso de que alguno decidiera salir a fumar...

            En cuanto llegue a la esquina me sentí aliviada. Tome el autobús hasta llegar a Matthew Street, entre a The Cavern Club, el publico, como siempre, era casi nulo. Era un club de jazz y yo conocía al dueño, me dejaba practicar el piano ahí, conocía a mi padre de casualidad, había ido a Paris una vez, donde mi padre estaba haciendo negocios y se habían conocido. Vi el grupo que se presentaba en el escenario, tenían mas un sonido blues pero igual era estupendo.

-Crees que son buenos?- me pregunto el señor Alan Sytner el dueño.

-No es jazz, es blues, pero si, son buenos- le sonreí.

-Se aprovechan de mi tolerancia, en especial tu-

-Yo?-

-Si, practicando aquí todo el día, tengo un publico que complacer-

-Si tuviera publico, eso si seria un problema-

Se rio sacudiendo la cabeza.-Ve y siéntate, veré que hay de comer, ahora se desocupa el piano-

            Me senté y me llevo un sándwich que obviamente acababa de preparar, ese señor siempre me recordaba a mi padre. Hablamos sobre mi escuela y sobre la música.

-No me gustaría dejar este lugar para nada- dijo mirando alrededor de el.-Pero pronto lo tengo que hacer, voy a vender este lugar-

-Venderlo? Por que? A quien?-

-No es un buen negocio, quizás en Paris donde vi el original, si, pero aquí en viejo Liverpool, no.-

-Usted que hará?-

-Dedicarme a otra cosa, no lo se, estoy demasiado viejo para esto-

-Donde practicare el piano?-

Sonrió.-No te preocupes, seguro y eso se arreglara-

            Antes de que pudiera contestarle el piano se desocupo, si, el publico era escaso por esos rumbos, a nadie le importaba realmente que se estaba tocando en el escenario. Me senté en el piano y al tocar las primeras notas todo desapareció, cuando tocaba, no era Bess. Simplemente volvía a ser Evangeline, la persona menos compleja. No la zorra, manipuladora sin corazón enamorada de John Lennon sino... solo Evangeline.

capitulo 11! asdklfñasjdlf jajajaja respondiendo a sus comentarios: citla, tu comentario me dio algo de risa y miedo jajajaja XD si, es una puta, te lo adverti desde el inicio XD y mer, si es ese richard, osea ringo! :3 jajajaja bueno, dejen sus fics aca abajo, les juro que ahora si comento! por cierto, estoy leyendo una que es muy de mi agrado, es de mary, aun no la termino pero sklfajsdlf jajaja cuando termine se las dejo aca xD lean y comenten! besos! bye :D